A veces pienso esto: hay algunas cosas para las que ya pasó el momento. Son pocas porque no creo que la edad nos limite a seguir intentando y probando nuevos desafíos pero pongamos que para empezar una carrera artística es tarde por ejemplo.

Y aunque a veces ( pocas veces) eso me genere cierta nostalgia siento que estoy en esa edad en la que me puedo dar tantos permisos… el primero el del disfrute. Tengo la independencia y los recursos internos y externos para disfrutar de tantas cosas. Me puedo permitir dormir las horas que quiera… ya no hay tantas prisas ni hay alguien de quien hacerme cargo.

Estoy en esa edad en la que elijo a conciencia, en la que vivo en forma responsable haciéndome cargo de mis decisiones, las asumo y aunque me equivoque también asumo la equivocación. Y de la equivocación viene el aprendizaje.

Estoy en esa edad en la que ya han cambiado las prioridades y los intereses.

Me miro y me enorgullece cómo he mantenido mi físico. Parecerá frívolo pero tener 40 años y mantenerse en forma habla de disciplina y amor propio. Así que para mí no es menor. Es fácil lucir estético cuando se tienen 20 y tantos… Es fácil y no requiere esfuerzo porque el tiempo no ha actuado sobre tu cuerpo. La cuestión es verse bien cuando eso implica trabajo.

Y lo más interesante del aspecto físico es que mejora cuanto mejor está el espíritu. No me crean, póngalo a prueba. La luz que irradia una sonrisa auténtica de alguien que ríe porque realmente conecta con la alegría te hace ver joven. El brillo de unos ojos que irradian gratitud por haber logrado cuanto hayas logrado te hace ver joven.

Hace unos días una amiga me contaba que su ex estaba saliendo con una chica más joven y eso la había alterado. Yo no lograba entender por qué. Para mí era tan poco probable que alguien de 20 y tantos o incluso 30 pudiera brindarse con la madurez emocional que lo hizo mi amiga con sus 40´s  que no pude más que hacerle entrar en razón.

No critico a los más jóvenes, sólo agradezco y valoro estar en la etapa de la vida en la que estoy, con la sabiduría y la humildad que tengo hoy, que me permite andar distendida, sin prisas ni egos, con mente clara y corazón abierto.

I´m not that young anymore… y aunque a veces quisiera que algunas cosas hubieran sido distintas, aunque hubiera querido actuar distinto en algunas circunstancias,  sé que todo eso me llevó a ser quien soy hoy. Y esta que soy hoy me encanta.